Nunca un intérprete del lenguaje de signos había adquirido tanta notoriedad y fama como Thamsanga Jautjie, intérprete en este caso de los dirigentes que intervinieron en la ceremonia del funeral de Mandela.
Thamsanga, más que hacer traducción en
lenguaje de signos, realizó signos en “su lenguaje” dignos de que se le
interpretaran a él. El susodicho intérprete escenifica movimientos de manos inconexos,
sin sentido e indescifrables, alegando
que sufrió episodio esquizofrénico en el que “oía voces y veía ángeles”, hecho
que le distrajo durante las traducciones. Y permaneció durante toda la ceremonia agitando sin parar manos y brazos
al albor de las entradas y paradas en los discursos de los intervinientes (ver)
Este episodio ha
dado lugar a multitud de valoraciones e
interpretaciones, unas muy serias, otras no tanto. Yo prefiero ante todo
quedarme con el resultado satisfactorio de que su alucinación no le llevó a ver otro tipo de ángeles más justicieros
que le provocaran reacciones menos pacificas.
Valorada la situación
desde la distancia del episodio esquizoide, yo creo que en realidad el señor
Thamsanga estaba “rapeando” ante “la hipocresía” de tanto dirigente
elogiando a Mandela y se convirtió en otro defraudador más en este caso
“hablando sin palabras”.
Profundizando más en esa
visión angelical que refirió tener, creo que en realidad fue producto de la
aparición del “angelito Rajoy” tras su
plasma y esto le hizo agitar y agitar los brazos en señal de “bienvenida” pensando
que tras él aparecería “el salvador” al que suelen acompañar los ángeles al
salir a escena. Cuando expresa su miedo al darse cuenta de lo que le estaba
pasando y se lleva la mano al cuello, me atrevo a considerar que el relaxing
cup de Ana Botella tuvo mucho que ver y
los cortes de mangas que aparenta realizar con sus manos me hacen suponer que no son otros que los finiquitos de
Cospedal. Todo lo que llevamos intentando entender durante estos años de
tortura informativa aquí, este interprete lo soluciona en una tarde en
Sudáfrica. Consciente, no obstante de su lio con los ángeles reconoce al mundo su equívoco, pero ninguno
de los angelitos que lo rodeaban le apoyó.
No hagamos caza de
brujas. Yo creo que Thamsanga medicado
puede ser muy útil, porque es buen actor, interpreta a los “angelitos del
mundo” muy bien, se mueve por el escenario con prudencia y comunica “sin
hablar” lo que otros hablando no hacen.
Propongo que se le
contrate en este país para interpretar las ruedas de prensa de nuestros
políticos y dar luz a “los ángeles salvadores” de sus sueños. Creo que este
"profesional” nos ayudará s salir de la crisis con uno de sus magistrales cortes
de mangas.
Ahora que están tan de
moda los donativos y las campañas solidarias, inicio la mía desde estas líneas
pidiendo la contratación sin finiquito para Thamsanga y “sus ángeles”.
PD: Os dejo con una
verdadera intérprete del lenguaje de signos para que disfrutéis.
Muy bueno Begoña. El interprete me recuerda a nuestros políticos: creeemos que dicen cosas sensatas y realmente nos damos cuenta mas tarde del disparate.
ResponderEliminarAsí es .Y lo que nos queda por interpretar aún......
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